Entre los niños, la hipoacusia (reducción de la audición por debajo de lo normal) es la anomalía congénita más común, superando incluso al Síndrome de Down y la parálisis cerebral infantil, con una tasa de 1 a 3 por cada mil nacimientos en el ámbito global.
Desde 2010, en Guanajuato se lleva a cabo el Tamiz Auditivo Neonatal para asegurar la detección temprana, el diagnóstico precoz y la atención integral de los niños con problemas auditivos.
Durante estos años de implementación del tamizaje auditivo en recién nacidos, se ha fortalecido la infraestructura hospitalaria con 57 equipos portátiles de emisiones otacústicas, distribuidos en hospitales especializados, generales, comunitarios y CAISES. Además, se ha capacitado al personal de salud para garantizar servicios de alta calidad.
El Hospital de Especialidades Pediátricas cuenta con personal experto en la atención de niños con dificultades auditivas, ofreciendo incluso implantes cocleares sin costo.
Estas acciones fomentan la detección temprana y la atención completa de los niños guanajuatenses, promoviendo su plena integración e inclusión social con respeto a su dignidad y derechos fundamentales, manteniendo siempre la calidad y calidez del servicio.
La detección temprana de problemas auditivos es crucial, ya que un niño que no puede oír no desarrollará su lenguaje oral y enfrentará dificultades para aprender a leer y escribir. El lenguaje que un niño sordo logre desarrollar a los cuatro o cinco años será crucial para su comunicación a lo largo de su vida.
